Dimos un placentero recorrido por algunos de los museos más interesantes que la Gran Manzana nos regala para sumergirnos en su cultura y arte.
Texto: Paola Guzmán S.
El aire se siente más frío, al ambiente más lluvioso y lo árboles comienzan a cambiar sus hojas de color, estas señales nos avisan que si visitamos Nueva York durante esta temporada, las mejores actividades nos esperan afuera y adentro de la ciudad.
Nueva York cuenta con una amplia cantidad de museos y nunca está de más escaparse a ver esa obra favorita que tanto te gusta en MoMA o tal vez ver con nuevos ojos esas esculturas tan impresionantes del MET.
Aquí te dejamos unas buenas opciones para visitar mientras se recorre esta hermosa ciudad en una temporada que también la hace aún más especial.
Una de las nuevas opciones está en el Museo de Historia Natural pues construyeron toda una nueva parte con una arquitectura muy impresionante. En esta sección del museo llamada Gilder Center hay nuevas galerías y experiencias únicas, que incluyen un insectario, un vivero de mariposas, una exhibición de cuarzos, piedras preciosas y semipreciosas, así como exhibiciones de colecciones de piso a techo. La entrada al Gilder Center está incluida en la entrada al museo, pero se requieren boletos adicionales para el Davis Family Butterfly Vivarium y para la experiencia inmersiva Invisible Worlds, la cual disfrutarán tanto niños como adultos.
Otro de los museos que vale la pena visitar es el MoMA, pues actualmente hay una obra de arte de IA que solo por ver esa obra vale la pena ir; además de sus exhibiciones temporales que van cambiando constantemente, por lo que siempre hay algo nuevo que ver.
La obra Unsupervised, del artista Refik Anadol utiliza inteligencia artificial para interpretar y transformar más de 200 años de arte en el MoMA. Este artista es conocido por sus innovadores trabajos mediáticos e instalaciones públicas. Anadol ha creado obras de arte digitales que se desarrollan en tiempo real, generando continuamente formas nuevas y de otro mundo que envuelven a los espectadores en una instalación a gran escala. Aunque en un principio esta obra solo estaba planeada para exhibirse por poco tiempo, el museo acaba de anunciar la adquisición de la obra, por lo que estará a la vista cada vez que uno visite este gran museo.
Por su parte, el museo insignia y un must cuando se visita Nueva York es sin duda el MET. Tal vez muchos ya lo han visitado, pero de seguro que nadie ha podido terminar de verlo con una o dos visitas y solo por eso vale la pena ir de nuevo. Hay que ver lo que no se ha visitado, y ver lo visto con nuevos ojos. El MET es como el museo Louvre de América y su vasta y gran colección de arte siempre impresiona a cualquiera que lo visita. Además de que ir a su tienda y comprar uno que otro souvenir es otra de las paradas obligatorias.
Aunque el Botanical Garden de Nueva York no es un museo como tal, es uno de esos lugares poco concurridos por los turistas pero que es una joya de la ciudad, un edén en pleno Bronx con un sinfín de plantas, flores, árboles y hasta exposiciones temporales. Además cuenta con un café con cosas deliciosas en donde además de poder degustar una rica bebida con un panini o algo dulce, el Pine Tree Café, como su nombre lo indica, cuenta con una colección de pinos raros e inusuales de Asia, Europa y América del Norte que presenta especímenes centenarios de casi 100 pies de altura. Explorar este enorme jardín es un deleite, pues con tan solo caminar entre sus árboles, plantas o jardines de rosas uno ya se siente transportado a un estado de paz y calma que a veces es muy necesario después de pasar un buen rato en la ciudad. Esta es la escapada perfecta para disfrutar de unos momentos de calma y de ver naturaleza impresionante a cada paso.
Otro de los lugares que vale la pena visitar en un día frío y lluvioso es la Biblioteca Nacional o la New York Public Library, la entrada es gratuita y simplemente con admirar la arquitectura del edificio vale más que la pena. Además de que se encuentra ubicada en una zona en la que seguramente estarás más de una vez. Recorre sus distintos pisos, sus galerías y sus exposiciones y, por supuesto, no dejes de visitar su tienda, la cual para nosotros es una de las mejores tiendas de “museo” que puedes encontrar.
Otras opciones a visitar sin duda es el museo Whitney y el Guggenheim, así como las pequeñas galerías que se encuentran cerca de Central Park del lado Este. Nuestra favorita es la Neue Galerie con las mejores obras de Klimt y el mejor café y postres estilo vienés. Y ya si estás por esa zona, una galería con una colección privada en una hermosa ubicación es la Frick Collection, con obras renacentistas haciendo todo un recorrido hasta inicios del siglo XX.