El conductor y locutor, cuya actitud extrovertida le permite hacer su trabajo de manera diferente, engalana nuestra primera edición.
Talento: Eduardo Videgaray
Fotografía: Bryan Flores
Styling: Emanuel Catrina
Maquillaje y peinado: Roberto Sierra
Locación: Foro 916
Producción: Aarón Martínez
El dúo dinámico
En el cine, la televisión y los libros han existido dúos dinámicos y explosivos desde tiempos muy lejanos. Hablar del entretenimiento y los medios informativos de los años 90 y luego los 2000, no lleva a recordar a las duplas que han permanecido en nuestra mente y que incluso se mantienen vigentes.
Más que amigos, hermanos
Eduardo Videgaray y José Ramón San Cristobal son un ejemplo de ello. Han pasado de todo desde que se conocieron en la adolescencia, pero la chispa ante el público parece interminable. Al respecto, Eduardo nos hace un repaso:
“Ya nos hemos mandado a la chingada muchas veces. Pero somos como un matrimonio viejo. ‘El Estaca’ y yo nos conocemos desde la secundaria, somos más que amigos. Ese güey es mi hermano, es mi familia”.
Comenzaron a trabajar en radio, luego televisión y más adelante hasta incursionaron juntos en los negocios. “En esa época éramos unos drogadictos, borrachos, nos la pasábamos en la fiesta. Los finales de los 90 fue nuestra era más ruda”.
Llegó un punto en que la convivencia los desgastó hasta llegar a los golpes. “Nos dimos de madrazos una vez, me dejó un ojo azul y yo también a él. Nos dejamos de hablar como un año, pero nos volvimos a reunir. Decidimos no echar a perder la amistad y lo que hacemos profesionalmente: el trabajo que nos gusta hacer juntos y que nos ha resultado exitoso”.
Vayámonos respetando
Todo terminó en un pacto en el cual el respeto estaría de por medio: “ahora nos tratamos con una enorme suavidad, pasamos de decir: ‘pendejo, ¿por qué hiciste eso?, ¡no me interrumpas!’ a: ‘oye, José Ramón, a mí me da la impresión de que hubiera sido más eficiente si hubieras considerado que en ese momento yo estaba hablando y quería terminar la idea’”.
La corneta
Como sabemos, en la actualidad ambos suman esfuerzos conduciendo La Corneta, la cual se transmite por Los 40 Principales y W Radio, además del programa en Imagen Televisión “Qué importa” (en donde también comparte créditos con Sofía Rivera Torres).
Algo que los caracteriza es su peculiar estilo para ponernos al día con las noticias, con un humor y apertura de expresar sus ideas como en pocos espacios vemos.
“Si las cosas que decimos ahorita en radio las hubiéramos dicho en 1982, es probable que al día siguiente estuviéramos desaparecidos o tras las rejas. Definitivamente México ha cambiado”.
A pesar de los espacios que tienen, ambos han buscado nuevos formatos para llevar aún más lejos la libertad de expresión: “la radio sigue siendo abierta, en un horario familiar, y la ley nos impide decir ciertas cosas. No es que haya una censura gubernamental o de la empresa, nos dejan decir todo lo que se nos dé la gana, pero evidentemente no podemos violar la ley”.
En busca de más libertad: La Corneta Extendida
Es por esto que han encontrado en las plataformas digitales el lugar para exponer sus ideas con todas las letras y palabras. “Estamos muy emocionados porque acabamos de lanzar hace unas cuantas semanas un proyecto en donde realmente no tenemos ningún tipo de censura, La Corneta Extendida, un podcast que se está transmitiendo por Amazon Music y que ha tenido mucho éxito. Es liberador y una aventura poder hablar absolutamente sin censura, es la corneta cruda… Hasta se antoja oírla, ¿no?”.
Dijo que sí
Platicando con Eduardo, y recordando el año 2014, cuando conoció a Sofía Rivera Torres, nos cuenta: “desde que la vi pensé que iba a llegar lejos. Tiene una energía especial, es guapísima, inteligente, creativa y disciplinada para el trabajo”.
En la actualidad, la historia de la relación de ambos se ha entrelazado de formas cada vez más sólidas, algo que se transmite cuando los vemos juntos:
Mucha gente piensa que estamos locos y que damos asco porque nos vemos todo el santo día. Estamos juntos en la casa, juntos en la vida y juntos en la chamba, pero a mí me encanta. La verdad, me la paso bomba”.
Finalmente, Eduardo se sincera con nosotros y nos dice que Sofía es lo mejor que le ha podido pasar en la vida.
Y todavía no me la creo que esté conmigo. Le agradezco enormemente pues ha hecho mi vida muy feliz. Me la paso muerto de risa con las tonterías que se le ocurren. Es un ser humano único, una persona llena de bondad que me ha tratado increíble a mí y a mi hija. Hemos hecho una familia ahora los tres y no puedo más que darle gracias a la vida y a ella por aguantarme, y voy a aprovechar de aquí a que se dé cuenta del error que cometió al casarse conmigo”.